Gracias a las nuevas tecnologías aplicadas a la educación, nos encontramos con nuevos espacios virtuales que tienen multitud de posibilidades formativas para potenciar el conocimiento.
Una de estas posibilidades es el aprendizaje abierto (Open Learning) que a través de la utilización de materiales libres de derechos (Open Source) se produce un intercambio de conocimientos, experiencias, inquietudes y prácticas pedagógicas con los que se pretende generar una matriz de conocimiento en la red caracterizada por su flexibilidad y continuo cambio. Para llevar a cabo este tipo de aprendizaje, el participante adquiere un rol activo en el que él mismo es investigador y productor de conocimiento a través del trabajo colaborativo que lleva a cabo, realizando, de esta forma, un verdadero aprendizaje significativo. El rol del tutor también evoluciona para ser un facilitador y orientador del aprendizaje, otorgando mayor protagonismo y potenciando la actitud activa en el alumno/a o participante.
La educación abierta se caracteriza por seguir los principios de equidad, plena participación y conexión social. A través de estos principios y mediante la utilización de diversas herramientas y espacios colaborativos se produce la red de conocimiento propia de este tipo de aprendizaje.
¿Cómo podemos llevar a cabo esta metodología pedagógica? Antes de nada hay que diseñar las dinámicas formativas que se quieren llevar a cabo teniendo en cuenta que deben estar basadas en el aprendizaje colaborativo de los alumnos/as, investigar y seleccionar los espacios y herramientas colaborativas que mejor se adapten a las necesidades formativas que se tienen, realizar un seguimiento de la actividad formativa a lo largo de todo el proceso y llevar a cabo una evaluación de la eficacia de la formación, de la planificación realizada, de la valoración de los alumnos/as, del desarrollo del plan formativo y de la eficiencia de las herramientas colaborativas empleadas.
Como bien dice mi compañera Rosana Pérez en una entrada anterior del blog “la esencia y efectividad del elearning no reside en la tecnología que empleemos sino […] en tener claros los objetivos de aprendizaje […], plantear retos motivantes que hagan al usuario 100% protagonista y pensar en escenarios de aprendizaje que posibiliten y fuercen el intercambio […] entre iguales”. Por ello, como profesionales del e-learning tenemos en nuestra mano potenciar estas metodologías innovadoras y todas aquellas que vengan en el futuro. Y tú, ¿cómo desarrollas las metodologías pedagógicas innovadoras en la red?